Qué ver en Narbona y alrededores (Francia). Visitar Narbona en uno o dos días y ruta en coche por la zona.
Qué ver en Narbona, ciudad romana
Narbona/Narbonne es de una belleza exquisita y discreta. Una ciudad que en ocasiones pasa desapercibida, a pesar de sus 2.500 años de historia, su rico patrimonio y huellas culturales. Esta entrada «Qué ver en Narbona y alrededores», descubre el centro histórico de la ciudad más grande del departamento de Aude en la región de Occitania/Occitanie.
También incluye información de lugares próximos a Narbona, (pueblos, playas y espacios naturales) por donde continuar las vacaciones, la escapada de fin de semana o puente.
CONTENIDO Qué ver en Narbona Plano con los imprescindibles de Narbona Qué ver en los alrededores de Narbona Mapa alrededores de Narbona
QUÉ VER EN NARBONA Y ALREDEDORES
QUÉ VER EN NARBONA, CIUDAD DE ARTE E HISTORIA
El paso de las diferentes culturas aporta a Narbona una extensa y fascinante historia que palpita en su origen romano, el pasado musulmán e incluso con la cruzada albigense contra los cátaros.
Esta riqueza histórica se ve incrementada con sus monumentos religiosos y con el canal de la Robine, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Por todo esto, Narbona es denominada la «Ciudad de Arte e Historia», atesorando un rico patrimonio histórico y monumental con 2500 años de historia.
¿Interesa la Tarjeta Pass Narbona?
Si se pretende visitar los monumentos de Narbona hay que valorar si es rentable adquirir la Tarjera Pass-Narbona. Para hacerse una idea:
- Tarjeta Pass Palacio-Catedral, con acceso al Palacio Viejo, al torreón y a las colecciones arqueológicas tiene un precio entre 6€ y 4€.
- Pass Narbona Monumental, con acceso a todos los monumentos, entre 10€ y 6€.
Enlace web Oficina de Turismo de Narbona
Qué ver en la ciudad de Narbona/Narbonne. 10 imprescindibles
- Palacio de los Arzobispos y torre Gilles Aycelin
- Catedral de Saint-Just y Saint-Pasteur
- Jardines del Arzobispo
- Vía Domitia
- Horreum romano
- Pont de Marchands
- Barrio del Bourg
- Paseo canal de la Robine
- Les Halles
- Basílica de Saint-Paul
QUÉ VER EN NARBONA
1. Palacio de los Arzobispos y torre Gilles Aycelin
El palacio de los Arzobispos de Narbona es el segundo conjunto arzobispal de Francia, por detrás del Palacio de Aviñon. Fue construido por orden de los arzobispos de Narbona
Se trata de un conjunto monumental compuesto por: Palacio Viejo, Palacio Nuevo, la catedral y las torres (Gilles Aycelin, Magadalena y San Marcial). Una extraordinaria y magna arquitectura que pone de manifiesto el poder de los arzobispos en el medievo.
Junto a las grandes dimensiones del palacio, se alza la imponente catedral. Además, sobresale la robusta torre del homenaje Gilles Aycelín dominando todo el conjunto.
Origen de los palacios y torre
En relación al proceso de construcción: el Palacio Viejo, data del siglo XII. Un siglo después se levanta el Palacio Nuevo, reformado en el siglo XIX bajo la dirección de Violet-le-Duc. El torreón Gilles Aycelín es de finales del siglo XII y principios del XIV.
Esta construcción, tan dilatada en los siglos, da como resultado una mezcla de estilos: carolingio, románico, gótico, renacentista y neogótico.
En la actualidad, el conjunto arzobispal acoge la sede del ayuntamiento, el Museo de Arte y el Museo Arqueológico. Estos museos atesoran valiosas e interesantes piezas que permiten conocer Narbona desde el arte y los restos arqueológicos.
Y si queremos unas vistas especiales, hay que subir los 160 peldaños del torreón Gilles Aycelin.
Horario y tarifas Palacio de los Arzobispos
Horario. De lunes a domingo de 10:00 a 18:00
Tarifa. A partir de 6€. Posibilidad de adquirir pases para otros monumentos).
2. Catedral de Narbona
Catedral de Saint-Just et Saint-Pasteur
La catedral de Saint-Just et Saint-Pasteur, es una joya gótica sin terminar. Un imponente edificio cuyas bóvedas alcanzan los 41 metros de altura, situándose en el tercer puesto de las catedrales más altas de Francia.
Fue construida entre los siglos XIII y XIV, siguiendo el estilo de las grandes catedrales del norte de Francia.
Las vastas dimensiones eran necesarias por varios motivos; por un lado Narbona era una de las ciudades más ilustres de Francia en la Edad Media; por otro lado, mostraba el poder del arzobispado de Narbona que en ese momento perseguía a los herejes cátaros asentados en poblaciones de la región.
Sin embargo, su ejecución se vio truncada, y la obra quedó sin finalizar. Lo que no impide que esté calificada como uno de los templos góticos más bellos de Francia.
Entre sus atractivos destacan: las altas bóvedas, el coro, el retablo de Nuestra Señora de Bethleem, las vidrieras y sala del Tesoro con valiosos objetos litúrgicos como el evangeliario de marfil (s. XI) o el tapiz de la Creación (s.XVI).
El bonito claustro e incluso la parte del edificio sin concluir, son otros espacios a admirar.
Horario y tarifas
Horario. De lunes a domingo de 9:00 a 12:00 y de 14:00 a 18:00.
Entrada gratuita.
¿Por qué no se finalizaron las obras de la catedral de Narbona?
En un primer momento pensé que el motivo de que las obras quedaran incompletas fue la falta de recursos económicos, unido a otras adversidades que golpearon a la ciudad, como la peste o las invasiones. Pero no fue así.
Las obras no finalizaron porque para ello era necesario eliminar las murallas romanas, a lo que se opusieron los cónsules de la ciudad. Las autoridades religiosas querían continuar con su fastuoso proyecto pero las administrativas querían conservar el recinto defensivo. Como resultado, el techo de las galerías de la catedral es el inmenso cielo.
Qué ver en Narbona
3. Jardines del Arzobispo
Tras los monumentos más emblemáticos de Narbona y antes de continuar con el itinerario, nada mejor que un descanso en el Gran banco público, obra de Lilian Bourgeat (2014).
Se encuentra en los Jardins de l’Archevêque, unos jardines diseñados en el siglo XVII siguiendo el estilo de los jardines franceses.
Además, cuenta con árboles centenarios y un reloj solar que hace las veces de fuente. Lo que favorece un descanso agradable y refrescante.
4. Vía Domitia de Narbona
A pesar de sus orígenes romanos, no son muchos los restos que atesora Narbona de esta etapa de su historia. Si quedan las huellas de los carruajes romanos en la Vía Domitia, un vestigio de la primera calzada romana de la Galia.
La Vía Domitia se encuentra frente al palacio episcopal, en la plaza del Hotel de la Ville. Fue descubierta en el año 1997, cuando se ejecutaban las obras de peatonalización de la plaza.
Curiosidades de Vía Domitia
La Via Domitia fue la primera calzada construida por los romanos en la Galia. Comenzó a construirse a partir del año 120 a.C., posiblemente sobre un trazado ya existente. parece ser que estuvo en uso hasta el siglo IV.
Esta calzada unía los Alpes con los Pirineos, en un trazado paralelo a la costa. La misma vía llegaba hasta Cádiz, con el nombre de Vía Augusta.
5. Horreum romano de Narbona
Narbona nace como colonia romana, Narbo Matius, en el siglo II a. C. En el siglo VIII fue ocupada por los musulmanes procedentes de la Península Ibérica. La Edad Media fue un periodo de desarrollo económico y cultural, donde el arzobispado deja su impronta con la creación del palacio.
A pesar de que la cuna de Narbona es romana y de que posteriormente se convirtió en una de las principales colonias de la Galia romana, no se conservan muchos restos de este glorioso pasado, tan solo: la calzada romana, el puente de los Mercaderes y el Horreum.
El Horreum son unas galerías subterráneas del siglo I a. C. Se compone de estrechos pasillos que comunican diferentes estancias. Parece ser que en su origen formaban parte de un mercado o almacén público (horreum).
La calidad de sus muros y la buena conservación ponen en relieve el dominio arquitectónico de los romanos.
Horario y tarifas
Horario: De martes a domingo de 10:00 a 13:00 horas y de 14:00 a 18:00 horas.
Precio: Desde 5€. Primer domingo del mes es gratuito.
Qué ver en Narbona
6. Pont des Marchands
Una de los monumentos más curiosos de Narbona es el Puente de los Mercaderes «Pont de Marchands» pues aunque cruza el canal de la Robine, cuando se transita por él no se ve el río, como sería presumible, ya que este puente está habitado. A un lado y otro se alzan viviendas cuyos bajos están destinados a locales comerciales.
Fue construido en el siglo I a.C por los romanos, siguiendo el trazado de la Vía Domitia. Cruzaba el río Atax, río que fue desviado en la Edad Media y actualmente reemplazado por el canal de Robine.
Contaba con seis arcos, aunque en la actualidad solo es visible uno de ellos, pues los otros fueron cegados en la ampliación de la ciudad comercial de Narbona, haciendo las veces de cimientos o bodegas de las viviendas.
7. Barrio del Bourg
Cruzando el Pont de Marchands se llega al barrio del Bourg, un antiguo barrio de mercaderes con todo el sabor del medievo. Lo primero que nos recibe es una pequeña y coqueta plaza de nombre, Plaza de las Cuatro Fuentes. Junto a ella está la Casa de los Pregoneros (s. XIV) uno de los edificios históricos notables de Narbona.
8. Paseo del canal de la Robine a su paso por Narbona
Hasta en el siglo XIV, Narbona estuvo comunicada por vía fluvial, una vía ya utilizada en tiempos de los romanos, pero una fuerte riada cambió el curso del río Aude.
Esta circunstancia dejó incomunicada a Narbona hasta el siglo XVII, cuando se construye el canal de la Robine para dotar a la ciudad de puerto fluvial. Este canal tiene un recorrido de 32 kilómetros y cuenta con 13 esclusas (para permitir a los barcos salvar los desniveles). Se une con el Canal de Midi en la ciudad de Toulouse.
El paseo del canal de la Robine es conocido como «les barques» un espacio muy agradable y apreciado por los narbonenses para caminatas, paseos en bici…
La imagen más pintoresca del canal es a la altura del Pont des Marchands con sus casas sobre el puente.
El canal de la Robine está reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
9. Les Halles de Narbona
Al lado del canal se encuentra el mercado de Les Halles, considerado uno de los más bonitos de Francia.
Se trata de un edificio de metal, con pilares de piedra, grandes cristaleras y elegantes puertas. Fue inaugurado en el año 1901.
Un buen lugar para degustar la comida francesa o comprar productos de la zona.
Horario: Todos los días de 7:00 a 14:00 horas.
10. Basílica de Saint-Paul
Sobre la sepultura del primer obispo evangelizador de Narbona se levantó una iglesia de estilo románico de transición al gótico. Sus elementos a destacar son: la famosa pila bautismal con la rana, los capiteles románicos y la cripta paleocristina.
Horario: de lunes a sábado de 9:00 a 12:00 y de 14:00 a 18:00
Qué ver en Narbona
PLANO CON LOS IMPRESCINDIBLES DE LA CIUDAD DE NARBONA
QUÉ VER EN LOS ALREDEDORES DE NARBONA
Ruta en coche por lugares de interés
Próximo a Narbona se extiende el Parque Natural Regional de la Narbonnaise, con playas salvajes, lagunas, salinas, un «mar» rosa, estanques con pasarelas de madera para caminar sobre el agua, lagunas con flamencos…
También cuenta con unos pintorescos pueblos donde vivir la esencia de la región occitana en un ambiente de sosiego y tranquilidad.
Si todo esto fuera poco, a escasos kilómetros de la ciudad de Narbona se encuentra Amphoralis, un extraordinario yacimiento de una industria alfarera galorromana.
MAPA CON LUGARES DE INTERÉS CERCA DE NARBONA
QUÉ VER EN LOS ALREDEDORES DE NARBONA
Cerca de Narbona podemos disfrutar de patrimonio histórico-artístico-cultural y también del patrimonio natural. En los alrededores de la ciudad encontraremos: montaña, playas vírgenes, pueblos medievales, históricas abadías, lagunas, salinas… Un complemento ideal para alargar la visita por la zona.
1. Carcassonne
2. Abadia de Fontfroide
A 14 km de Narbona, en el silencioso valle de Corbières, entre campos e viñedos, se ubica la abadía de Fontfroide, una joya cisterciense, con un encanto especial tanto por la riqueza artística-monumental, como por su historia y por supuesto por su entrañable entorno.
Sobre su origen, fue fundada en 1093 como cenobio benedictino. En el siglo XII, los monjes benedictinos se unen a la orden cisterciense.
Entre sus elementos destacan: el claustro románico, la iglesia abacial (s. XII), la sala capitular y las diferentes estancias de los monjes.
Jardines y rosaledas completan el conjunto aportando serenidad a la sensación de recogimiento que invade el lugar.
Horario
Abierto todos los días de 10:00 a 18:00. Visita libre y guiada. Precios de 8,50€ a 13,50€.
Qué ver cerca de Narbona
3. Le Somail
4. Amphoralis en Sallèles-d’Aude
Si después de visitar la ciudad de Narbona queremos continuar conociendo el patrimonio romano, nada mejor que desplazarnos al Sallèles d’Aude (a 13 km de Narbona) donde se encuentra el museo de Amphoralis.
El museo de Amphoralis es el resultado de las excavaciones arqueológicas en un industria alfarera galorromana que estuvo activa entre el siglo I a.C hasta el III d. C.
Consta de cuatro espacios distribuidos entre: 1. espacio de museo interior; 2. yacimiento arqueológico; 3. recreación de los talleres y el pueblo alfarero; 4. jardín con las plantas que existían en época romana.
No hay que pasar por alto Sallèles d’Aude. Una bonita localidad vertebrada por el canal del Aude, donde podemos dar un agradable paseo y acercarnos hasta alguna de sus exclusas para disfrutar del espectáculo de apertura y cierre de las exclusas cuando llegan los barcos.
Qué ver en los alrededores de Narbona
5. Parque Natural Regional de la Narbonnaise
Entre la ciudad de Narbona y el mar Mediterráneo, se extiende el Parque Natural Regional de la Narbonnaise. Una especie de pulmón verde muy rico en flora, fauna y paisajes (playas, estanques, salinas, lagunas, viñedos… ). La paz y el sosiego es otra de sus características.
El Parque Natural de la Narbonnaise tiene una extensión de 80 hectáreas. Algunos lugares a destacar son:
5.1 Massif de la Clape
Un macizo calcáreo de 15.000 hectáreas, donde tienen cabida paisajes muy variados: viñedos, valles, bosques… así como una rica biodiversidad.
También cuenta con algunos formaciones extraordinarias como le Gouffre de l’Oeil-Doux, un impresionante cortado de altas paredes verticales que resguarda una especie de ojo de agua en color esmeralda.
Para llegar hasta la Gouffre de l’Oeil-Doux hay una ruta de escasos 3 km que parte del parking con el mismo nombre. (No tuvimos la suerte de conocerlo pues el acceso estaba cerrado por mantenimiento).
5.2 Gruissan
Uno de los pueblos más curiosos de la zona es Gruissan, con un casco histórico de forma circular en cuya cima se alza la torre medieval de Barberousse, el único testigo del castillo del siglo XIII.
Gruissan se sitúa entre mar, lagunas y salinas.
5.3 Salinas de l’île Saint-Martin de Gruissan
Lagunas y salinas rodean a Gruissan. Una de esas salinas son les Salin de l’île Saint-Martin de Gruissan, un mar rosa con montañas del sal.
En la carretera D-232 nos encontramos con una tienda-museo donde conocer todo lo relacionado con las salinas, el oficio y los diferentes tipos de sal. A primera vista parece una tienda preparada para atraer turistas. Y sí, lo es. Pero merece la pena hacer una parada.
También cuenta con un mirador al «mar rosa», un bar y un restaurante. El atardecer fue el momento que elegimos para conocer este lugar y nos agradó bastante. Las tonalidades rosáceas van cambiando con la caída del sol.
Entrada gratuita.
5.4 Bages
De camino a Peyriac-de-Mer hicimos una parada en Bages, una pequeña localidad de estrechas calles donde la paz reina en todos los rincones.
Aquí, también disfrutamos, en soledad, de las vistas a la laguna de Bages-Sigean.
5.5 Peyriac-de-Mer
Otro pueblo con encanto es Peyriac-de-Mer tanto por su centro histórico con calles de piedra y arquitectura típica occitana, como por su entorno entre lagunas y salinas.
Después de recorrer el bohemio centro urbano, hicimos una pequeña ruta hasta el Étang du Doul.
Y por supuesto, no podía faltar la actividad estrella: dar un paseo por las pasarelas de madera sobre los estanques y salinas, habitat de flamencos, garzas, garcetas, garcillas…
Otros lugares de interés en la región de Occitania:
Albi y el museo de Toulouse-Lautrec
BUEN VIAJE
¡HASTA PRONTO!
Hola, Ana
Cuántos días son necesarios para el recorrido que propones? Por Narbona y alrededores?
Gracias de antemano
Hola, Claire
Para visitar Narbona y los planes que propongo por los alrededores vas a necesitar una semana, aproximadamente.
Pero siempre puedes adaptarlo a más o menos días. Ten en en cuenta que deberías dedicar un día entero a Narbona, otro a Carcasonne, la abadía de Fonfroide medio día y el Parque Natural es muy amplio por lo que dos días podría estar bien para ver playas, salinas, estanques…
Ya me contarás.
Bon voyage